Monte Latito (951 d.C. – actualidad)
La primera referencia a Monte Latito (Montis Latito), es decir, Monte Largo, data del 951 y aparece en la donación del pueblo de Melres al Monasterio de Guimarães. Años más tarde, en enero de 959, se vuelve a mencionar en el testamento de Mumadona Dias (Alpe Latito), y nuevamente en 961 (Monte Latito) y 968 (Alpe Latito).
Monte Latito es, por tanto, un topónimo utilizado en la Edad Media para designar una zona cuyos límites desconocemos, pero que incluía el Castillo de Guimarães.
Hoy, el término Monte Latito se utiliza para describir el espacio ajardinado que rodea el Castillo, la Iglesia de San Miguel y el Palacio de los Duques de Bragança. Con unos 39 000 m2, sirve como espacio de ocio y de circulación de peatones entre los tres monumentos nacionales.
Recientemente rehabilitado, este parque ha renovado hoy las condiciones para el uso de su espacio y una mayor valoración de sus elementos construidos de mayor reconocimiento e interés.
En este parque, en la entrada principal junto al Palacio de los Duques, la escultura de Afonso Henriques (de Soares dos Reis) recibe con garbo a los visitantes.