Tapiz Publius Decius Mus: Publio Decius Mus consulta los Auguros
Autor: Jan Raes II (tapicero) y Peter Paul Rubens (artista)
Centro de Fabricación: Bruselas, Flandes
Datación: 1618-1643
Materia: Lana y Seda
Dimensiones (cm): 410 x 477
N.º de Inventario: PD0202
Este tapiz formaba parte de un marco que originalmente constaba de siete tapices y una o dos “superposiciones”, realizadas a partir de “tarjetas” encargadas al pintor Peter Paul Rubens. En este marco, se documenta la historia del cónsul romano Publio Decio Mus, según la descripción de la obra “Ab urbe condita”, del historiador romano Tito Livio. Los cónsules Publio Decio Mus y Tito Manlio dirigen a los romanos en la guerra contra los latinos (340-338 a.C.), habiendo soñado ambos con un gigante que les predijo “que serían sacrificados al infierno, el general de uno de los ejércitos y el ejército contrario, siendo necesario el sacrificio de uno de los cónsules para obtener la derrota del enemigo”. Cumpliendo un acto de ‘devotio’, Decio Mus se lanza a la muerte contra el ejército latino en la batalla del Vesubio.
La serie de siete tapices narra los distintos episodios relacionados con esta historia, de los cuales el Palacio Ducal cuenta con cinco, faltando la representación de la Muerte de Publio Decio Mus y su Funeral. Este conjunto de tapices demuestra el genio creativo de Rubens, que utilizó “composiciones limitadas a unas pocas figuras heroicas y monumentales, dibujadas en poses dramáticas y concebidas en colores vivos”, muy al contrario de la temática utilizada anteriormente en la tapicería, que se caracterizaba por escenas con un gran número de personajes situados en paisajes meticulosamente trabajados. Rubens también trabajó de forma diferente en las cenefas de estos tapices, que ya no representaban “pequeñas escenas individuales, como era costumbre en la época”, sino que estaban “decoradas con figuraciones de sátiros entre frutas y flores y aves exóticas, figuras femeninas recostadas sobre las que fluyen ríos de agua animados por criaturas marinas (peces, cangrejos, serpientes marinas), y figuras humanas con atributos alegóricos al Palacio del tiempo, al curso y a los designios de la vida humana”. María Antonia Quina explica también que “la composición de esta moldura recuerda el trabajo de Jacob Jordens en las molduras de su serie de Ulises, creada hacia 1635 y conocida a través de una edición posterior de 1665-66 en el Palacio del Quirinal de Roma”. Hay que añadir que Rubens utilizó en estos tapices una gama de colores que nunca se había utilizado antes, lo que obligó a los tapiceros a utilizar nuevos pigmentos “para los nuevos tonos, como el amarillo limón y el amarillo lila”, que resultaron inadecuados porque perdían su color original con más facilidad que los antiguos.
En esta escena el general romano consulta a los arúspices sobre su sueño y, tras el sacrificio del animal que yace sin vida, representado en primer plano, la lectura de las vísceras indica que es el elegido para dar su vida por Roma.
María Antonia Quina
Publius Decius Mus
Político de la República romana, que pertenecía a la gens Decia (familia plebeya de la antigüedad, que se hizo conocida en la historia romana por el sacrificio de varios miembros por la conservación de su país).
Publio Decio Mus es mencionado por primera vez en el año 352 a.C., cuando fue nombrado uno de los quinqueviri mensarii (banqueros públicos), cuya finalidad era saldar, en cierta medida, las deudas de los ciudadanos.
En el año 343 a.C., sirvió como Tribuno de los Soldados (rango de oficial en una legión romana) a las órdenes del cónsul Marcus Valerius Corvus Arvina en la Primera Guerra Samnita. Gracias a su heroísmo, en la batalla de Satícula, salvó al ejército romano de un peligro inminente.
En el año 340 a.C. fue elegido cónsul, junto con Titus Manlius Imperiosus Torquatus. En ese año comenzó la Segunda Guerra Latina (340-388 a.C.), durante la cual se libró la Batalla del Vesubio, que tuvo lugar entre la ciudad de Nápoles y Monte, comandada por los dos cónsules.
Durante esta batalla, Publio Decio Mus se hizo famoso por su legendaria devotio, en la que juró sacrificar su propia vida a cambio de la victoria. Según Tito Lívio, Decio Mus tuvo un sueño premonitorio en el que anunciaba que el ejército cuyo general había muerto durante la batalla iba a ser el vencedor. La devotio (una forma extrema de votum, promesa hecha a una divinidad), es un ritual romano y el más famoso de su historia está relacionado con Publio Decio Mus. Esta costumbre también se conoce en las leyendas griegas.
